Esta serie profundiza en el concepto del potencial de la vida, explorando cómo, en la naturaleza, esta siempre encuentra formas inesperadas y poéticas para manifestarse. En el centro de esta propuesta está una reproducción en porcelana de la semilla del zapote, una fruta tropical cargada de simbolismo. Su forma, delicada y orgánica, sugiere una conexión visual y conceptual con el órgano sexual femenino, estableciendo un diálogo entre la fertilidad, la creación y la continuidad de la vida.

El uso de porcelana no es casual: este material, a la vez frágil y resistente, evoca la dualidad inherente a la vida misma. La meticulosa atención al detalle en el proceso de desarrollo del molde y el vaciado resalta la textura y las características únicas de la semilla, transformándola en un objeto que trasciende su forma natural para convertirse en un símbolo de creación y renovación.

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